“La vida es una milonga”, creación del artista, sorprendió a una multitud que se congregó en las inmediaciones del Puente Transbordador Nicolás Avellaneda, para contemplar el show de fuegos artificiales que recreó los movimientos de un bandoneón, al ritmo del 2 x 4.

Foto: Telam

La zona se transformó en una gran milonga al aire libre mientras el artista chino trazó un recorrido poético a lo largo de la historia del tango, su música y coreografía, a través de un show bello y de alto impacto visual. Emoción y sorpresa causó entre los presentes este orquestado espectáculos de 80 minutos, que incluyó 43.000 disparos de fuegos artificiales que alcanzaron en su punto máximo a 160 metros de altura, sobre la Vuelta de Rocha, donde se montó una plataforma de 3 mil metros cuadrados para instalar la pirotecnia